Jacob Jordaens


(Amberes, 1593 – Amberes, 1678)

Este artista barroco flamenco, fue un pintor dibujante y grabador, considerado el último gran maestro de la pintura barroca en los países bajos. A pesar de su talento, alcanzó la fama tras la muerte de los pintores Pedro Pablo Rubens y Anton van Dyck, con quienes tuvo contacto y colaboró. De ellos, se aprecia una gran influencia en su obra, aunque su pintura se diferencia de la de estos pintores por su estilo mucho más expresivo y sensual.

Colaboró con Rubens en la serie de los diversos modelos para tapices que le encargaron al maestro, así como en el conjunto de obras para la Torre de la Parada, cometido de Felipe IV. Posterior a 1641 se convirtió en el primer pintor de la corte por un notable período de tiempo. Más tarde, pasó a estar bajo la disposición de la reina Cristina de Suecia.

Jacobo Jordaens fue el discípulo de Rubens que mejor representó el espíritu nacionalista flamenco. Su arte fue un verdadero testimonio grafico de la época. Recogió, admirablemente, tipos, costumbres y paisajes. Y, como artista barroco, llevó al límite el gusto del estilo por la acentuación del color (blancos luminosos y rojos marcados), el abigarramiento de las formas y las exageraciones de los gestos de los personajes.
Con la ayuda de sus discípulos, pintó obras de gran formato con un marcado gusto por los detalles. Los temas que abordó fueron el religioso y el laico. Dentro de este último puso su atención en las fiestas, los banquetes y las escenas cortesanas.

Entre sus obras más destacadas están Autorretrato con su familia, El rey bebe, La familia de Jordaens en un jardín, Pan tocando la flauta, Los cuatro evangelistas, La Sagrada Familia con un ángel, y La Piedad. Estas y otras pueden encontrarse en el Museo del Prado, el Museo del Louvre, el Museo Thyssen-Bornemisza de Madrid, el Museo de Bellas Artes de Bilbao, y el Palacio de Liria de Madrid.

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